Ya he mencionado que a mi gordo le encantan los cables y los hilos, siente una fascinación irresistible por esas cosas.
Claro que no lo fomento por el poder destructivo que eso implica además de que puede salir lastimado… pero de vez en cuanto lo atrapo tan apisonado en ello que no puedo resistir dejarlo jugar.
2 comentarios:
¡Hmmm! La fascinación de ese animalito lo llevó una vez a creer que el cable cargador de mi pocket pc era una liana, y el muy condenado se trepó de ella, llevando al mencionado aparato por los suelos.
Lo bueno es que el ruido lo asusto... y también verme llegar con un diario enrrollado alias "correctivo"; jejeje.
Pobre, se que mi gordo no es un santo y que es mal portado cuando no lo veo :p
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