jueves, 26 de mayo de 2011

Mi sutil encanto…

Sé que no soy fácil, y es por ello que no espero nada de la gente. Es como una regla que tengo, no espero ser santo de la devoción de nadie porque reconozco que no soy amigable.

Pero por el bien de mi vida social, decidí ser menos yo en mis clases de inglés, no es que mienta, solo omito cosas y hago un esfuerzo por ser sociable, aunque no contaba con que mi sutil encanto se da a notar sin querer.

Pongo ejemplos:

Estábamos practicando sobre lugares y cosas que haces en ellos, así que el profe pregunta ¿vas al cementerio a tomar un paseo?, claro el esperaba que responda en negativo (ese era el objetivo), y hay voy yo y digo SI!! jejeje, ya habían salido las palabras de mi boca cuando mi cerebro se dio cuenta que la estaba cagando. Que puedo decir, el cementerio se me hace un bello lugar es tranquilo, algunos tienen bellas criptas y mi alma logra una paz que solo se compara con los ronroneos de mi gato a su lata de atún.

Estaba yo leyendo “La historiadora” en lo que esperaba que inicie la clase, y mis compañeras comenzaron a hablar le libros. Hay va mi bocota a decir que los libros de cuauhtemoc sanchez son libros de secundaria y que a paulo coelho le faltaron pantalones para matar a la protagonista de “Verónica decide morir”… claro todo ello lo termine con la frase “desde mi particular punto de vista claro, hay libros para todos, a mí los de auto ayuda me dan hueva”. Huy pa que les cuento, creo que ofendí a los héroes de alguien porque me terminaron diciendo que no se disfrutar la vida, que todo lo veo negativo, no se vivir, lo que solo respondí “depende a que llames disfrutar”.

Repasábamos términos y llegamos a definir ternura, amor, abrazo, empalago y esas cosas, y yo dije que no abrazo y que no soy de caminar de la mano como colegiala. Entos me preguntan que si no decía palabras tiernas a mis compañeros de trabajo… y antes de poder darme cuenta mi boca se abrió y dijo “huy a esos menos”, me salió tan natural que a la mitad de la frase mi cerebro solo pensó “ya la volví a cagar”. Pero es la verdad, una cosa son los amigos y otra los compañeros de trabajo. A mí me ofendería que un compañero se dirija a mí como como mi reina (esas confiancitas no se dan a cualquiera)

Y ya ni les digo las caras que pusieron cuando dije que era atea, huy!, una compañera no se persigno nomas pa no verse más obvia
Que puedo decir, mi encanto natural no es del agrado de la gente. Pero si logras pasar las barreras “me vale madres tu dios” “odio los niños” “prefiero a los animales que a la estúpida gente”, descubrirás que soy un encanto de mujer, mente abierta, libre, buena amiga, entregada, con corazón de pollo por los pobres animalitos de la calle, buena compañía cuando la gente no desea hablar, no se me da el baile pero hacemos el ridículo en bola, inteligente, sencillita, carismática… sutilmente perfecta XD

No hay comentarios: