domingo, 28 de agosto de 2011

Me auto margino


Yo sé que lo que hago aleja a la gente, pero por lo menos los que se quedan son honestos.

Por ejemplo, cada que alguien cumple años en la oficina se pide una coperacha se le compra pastel, sabritas, refresco y se le celebra en ese mágico momento donde fingimos todos que nos toleramos.

El detalle está en que a mí me duele un chingo aflojar 25 pesos si no puedo comer cosas dulces y jamás me comprar una miserable lata de coca cero. Entos 25 pesos por pellizcar unos chetos pues no me late y si es fin de quincena pos menos.

Claro que eso me deja como la mala que no coopera, pero alguna vez pensaran que también es malo que sobre dinero y ni así me compren un inche refresco para pasarme mis dos chetos que me tocaron. Así que cuando deciden hacer piza o algo que pueda comer con gusto coopero, pero pasteles nop.

Otra es que no opino, hablan de cosas como chistes, futbool, cosas paranormales, etc y yo pegada a mis audífonos sin opinar. Eso me margina pero con la mente tan dañada que tengo para que ser brutalmente honesta, para que se enojen y traten de hacerme ver el mundo color rosa, naaa, además en la oficina aplico “todo lo que digas será usado en tu contra”.

Tristemente así es, el celador es de los que te dicen “si, si, si” y de repente lo cambia por un “no, no, no” y si le hacen ver que está mal o que él dijo que si primero… bueno es un drama y amenazas de tipo “te acusare con dios, ten miedo pecadora”, “te castigare porque mis chicharrones truenan”.

Así que calladita me veo más bonita.

No hay comentarios: